¿A qué hora vives?

Vivo a cada hora, a cada minuto, a cada segundo. Claro que hay segundos más vivos que otros, y los más vivos son los recuerdos con los que me quedo, con los que construyo mi vida y los que transmito a quienes me dan la oportunidad. Estos segundos trato de que cada día sumen 24 horas, y para ello día con día, tengo que encontrar pasión en mi corazón.

Vivir para mi es sentir, y para verdaderamente sentir, es necesario disfrutar cada sentimiento con plenitud.



Gracias por la reflexión Chio Yllescas.

El mes que comencé a patinar...

El mes que comencé a jugar hockey el escándalo de la Lewinsky estaba a todo lo que daba y EEUU atacó Iraq, en el Reino Unido se abolió formalmente la pena de muerte, Japón y China firmaron amistad, también comenzó la construcción de la Estación Espacial Internacional, America Online compró Netscape, salió el juego de Zelda para el N64, y en México el Popo andaba activo y subió la gasolina... creo que la forma de operar en el mundo no ha cambiado mucho, pero creo que lo importante es que nuestro actuar sea diferente y que si en 15 años volteamos a ver atrás, el mundo sea diferente, al menos el nuestro.

Si en 15 años las personas que hoy tengo oportunidad de tocar, pueden sentir que están viviendo, y ser conscientes de ellas mismas, creo que habré cumplido con una de mis misiones en esta vida.

Pasión

Pasión es una palabra, y una filosofía de vida que me ha acompañado conscientemente más o menos los últimos 15 años. La pasión hace que todo sea intenso, que todo se sienta, quizás más de la cuenta, pero ese demás cuando son alegrías, nos acompañan toda la vida. La pasión es ese ingrediente que transforma la existencia en vida.

Por eso, cuando tenemos pasión, aunque muriéramos no dejaríamos de vivir. La pasión es nuestro legado en el mundo. Es el lenguaje de nuestro corazón. Es lo que hace que podamos enseñar algo. Es lo que nos permite aprender.